Matrimonio... uñas bien decoradas para esa ocasion.

Este hermoso diseño lo encontré en nails design.

Uñas acrilicas... y después como endurecer tus uñas.

1.Recorta tus uñas una vez por semana y límalas suavemente si aparecen orillas disparejas. Las uñas largas pueden ser atrevidas, pero también son más susceptibles a quebrarse que las cortas. Córtalas inmediatamente después de un baño o una ducha, cuando están más suaves, para prevenir quebraduras indeseadas.

2 Restriega tus uñas con un cepillo cada vez que te bañes. Quitar las uñas acrílicas deja a menudo pequeños quiebres que son susceptibles a la infestación de bacterias y restregarlas por encima y por dentro reduce la probabilidad de infecciones bacterianas.


3.Utiliza un par de guantes de hule mientras limpias o lavas los platos. El agua y los químicos son extremadamente secantes y quitarán la humedad de las uñas que ya están frágiles. Los guantes también evitan esa apariencia poco atractiva de pasa en la piel.


4.Pinta tus uñas con un esmalte endurecedor no tóxico. Los tratamientos endurecedores protegen la uña, alentando un crecimiento más fuerte y saludable. Vuelve a aplicar una vez por semana o cuando se produzcan quebraduras o se descamen.


5.Embadurna tus uñas y tus cutículas con crema para manos para restaurar los nutrientes y la hidratación. Cubre tus manos con una capa delgada de crema, frotándola sobre las cutículas y la piel a los lados de las uñas. Aplica la loción de dos a tres veces diariamente para mejores resultados.

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Estilo Disney

Mitos y verdades de las uñas

¿Hay que dejar descansar a las uñas del esmalte; una uña dura es sana; el acrílico daña las uñas? Juntamos los mitos más comunes y te decimos si son falsos o ciertos

Perder a un amor tal vez no duela tanto como perder una uña. De verdad. Más cuando la cuidaste y procuraste por mucho tiempo para que creciera, y de pronto, chin, se rompe. Las uñas son sin duda uno de los símbolos femeninos más sexys y versátiles, por eso es que las mujeres las atendemos tanto decorándolas, poniéndoles algún tratamiento para que crezcan, limándolas, etc.

Muchas veces, el peor enemigo para las uñas es ¡la desinformación! Por ello le decimos adiós a los mitos. Te presentamos los cinco más comunes y la realidad sobre ellos de acuerdo con los expertos en uñas.

MITO: hay que dejar descansar por algún tiempo las uñas del esmalte.

REALIDAD: depende. No es necesario dejar descansarlas siempre y cuando apliques previo al esmalte un tratamiento de acuerdo a tu tipo de uña, pues además de nutrir, las protege del color; pero si aplicas un barniz de baja calidad (es decir, aquellos que contienen productos tóxicos como el formaldehido, tolueno y falato de butilo), sí es necesario que dejes descansar tus uñas entre un color y otro.

MITO: una uña dura es sana.

REALIDAD: falso. Las uñas por naturaleza deben ser flexibles. Tenemos la idea errónea de que una uña dura es saludable, y no, pues al contacto con cualquier superficie se pude romper. Una uña rígida se le conoce como quebradiza, pues esta tan dura que incluso se revienta por los lados debido a la misma dureza.

MITO: la presencia de puntos blancos es falta de calcio.

REALIDAD: falso. Generalmente las uñas secas generan puntos blancos, pero hay una enfermedad que se llama leuconiquia y se le denomina así por falta de minerales. La mala noticia es que científicamente se desconoce cuál es el mineral que nos hace falta y por el cual las uñas se ponen así.

MITO: ¿las uñas respiran?

REALIDAD: falso. Las uñas no respiran como tal, pero si es necesario que se ventilen sobre todo si se aplica acrílico.

MITO: las uñas de acrílico dañan la uña.

REALIDAD: cierto. Sí maltratan las uñas, pues la técnica para retirarlas es muy agresiva: se utiliza acetona pura y limas con granulado excesivo para poder retirar el producto, volviéndola porosa y débil.

MITO: una dieta balanceada influye en la salud de la uña.

REALIDAD: cierto. Así como se nota en la piel y en el cabello, también se refleja en el brillo y flexibilidad pues también necesitan queratina.

COMBINAR EL COLOR DE TUS UÑAS CON LA ROPA.

COMPLEMENTANDO COLORES

Cuando dos tonos opuestos se juntan y crean un look armónico, quiere decir que son colores complementarios. Ellos te ayudarán a salir de la rutina de usar un solo tono y te darán la confianza para combinar distintos colores en las manos y en la ropa.

Para usar el círculo cromático debes escoger el color que quieras combinar primero, ya sea el del vestido o el de las uñas, y ubicarlo en el círculo; después traza una línea recta que se encuentre al frente de este tono, y ese es el color que mejor se verá con lo que llevas puesto.

Si prefieres que tu look no sea tan contrastante, sino que se vaya por la misma gama sin ser exactamente el mismo color, escoge los tonos que están al lado de los que son directamente opuestos al que escogiste, así el contraste será menor.

LAS OPCIONES DE COLORES Y SUS COMBINACIONES

Combinar nuestro atuendo diario puede ser algo que a veces no tomamos en cuenta o no sabemos cómo hacerlo. Las mujeres nos guíamos por nuestro instinto de usar los mismos colores y combinarlos tanto en la ropa como en el maquillaje, pero otra opción para combinar son las uñas, pues podemos cambiarlas de color cada que nos plazca y son bastante visibles.

No se trata de usar el mismo tono en la ropa y en las uñas, sino que se debe buscar un color que complemente al otro en una gama distinta.

Así, descubrirás que el azul gana un buen complemento con un vestido amarillo. Para lograr esto, te puedes basar en el círculo cromático: un disco de colores que muestra tonalidades y funciona para encontrar una combinación con armonía.

Un ejemplo de combinación que no es muy contrastante es el violeta y el amarillo. Para que no sea muy drástico, el amarillo debe ir con violeta azulado o violeta rojizo.

Si lo que deseas es combinar al violeta, éste quedaría mejor con un amarillo verdoso o uno anaranjado. Para las que desean ser más discretas, otra opción son los colores análogos o vecinos en el círculo cromático: el verde, que combina con el azul y el verde claro.

Lo ideal para coordinar tu estilo es que éste sea sencillo y elegante, evitando estampados muy alocados, pues entonces te verías con una gran gama de tonalidades.

En caso de que uses esmaltes cromados, es mejor prestar atención a la "temperatura" del color de la ropa; guíarte por si los colores son calientes o fríos. Por ejemplo, si se escogen uñas plateadas, es mejor combinaras con ropa de tonalidades frías, ya sea en tonos azulados, verde, gris o violeta. Si usas colores dorados y rosados, combínalos con colores calientes como el rojo y amarillo.

Escoger colores es divertido, pero debes recordar el cuidado de las manos ante todo, pues tanto quita esmalte puede dejar la piel de las manos reseca.

Recomendamos usar hidratación específica para la zona de las cutículas, no sólo te fijes en la piel, pues éstas siempre son las primeras en denotar las manos dañadas.